Profesional de la contabilidad, publicó el año 1655 en Florencia el tratado «Della scritura conteggiante di posesión». Como administrador, se mostró en su obra especialmente interesado en el tema de la correcta gestión del patrimonio de una entidad, buscando lograr la máxima rentabilidad y el aspecto contable del control de gestión, adelantándose considerablemente a su tiempo, siendo considerado precursor de la moderna contabilidad de gestión. Fue fundador de la Escuela Florentina, que permaneció activa, hasta comienzos del siglo XIX.